EL
MAGO
La inquietud dura ya varios días, desde que oí la frase
no dejo de preguntarme de dónde pudo venir, qué artículo de joven visionario
del siglo XXII, delegado de los esperpentos mediáticos que aparecen a partir de
las doce en canales copados por profetas que, al amparo de imágenes, cartas o
similares, conjeturan sobre el destino de la plebe.
Yo,
que nunca imaginé asistir a esta barricada de casta, acabé acordándome del ente
que lo sabe todo, ese que se ha convertido, para la mayoría de las almas, en el
“nohaysecretos” del planeta, o sea, un
motor de batida, que despeja, cuando menos, cualquier atisbo de duda
humana y desbanca a todos los lumbreras
venidos a poco, con su aparición, el Sr
D. Google.
Creí por
fin, que llegado a casa a cualquier hora esa noche, y por mucho que el onírico Morfeo me llamara
a filas, convertiría mi duda en realidad, saber de dónde surgió tal locución,
que no me atreví a preguntar al emisario, no ya por falta de curiosidad, sino
por no descubrir mi ignorancia y temiendo incluso otra ocurrencia del pupilo
que me dejaría, aun más, con la fatídica y rastrera cara, que se suele poner
cuando no sabes qué decir.
Era una
noche tranquila, familiar en exceso, el abuso de la salsa Wok del Asiático
quizás fuera un pequeño inconveniente para llevar a cabo la búsqueda, no obstante y pensando que por otros
menesteres he permanecido hasta ciertas horas en vigilia, estaba dispuesto a
sacrificar minutos de relax y no acostarme con el sinsabor de la duda, que generalmente suele ser más
pesada que una vida vacía…
En aquellos
días, y a pesar de que lo que me entraba por el ojo solía ser más importante
que tener un subidón de talento, me dispuse a ir en contra del propio destino,
de la norma, de lo establecido, a manejar a mi antojo o casi, todo lo que se me
ocurría, a pensar y hacer justamente todo lo contrario, confiado en que la
felicidad es gratuita, e intentando demostrar una y otra vez lo sencillo que es
dominar a tu propia mente en pensamientos y hechos… ocupé tiempo en diseñar
mi estado de ánimo, canciones, palabras, estados, acciones… todo justamente lo
más lejano a lo que solía tocar siempre, todo en contra de cánon establecido y
moral,… Contra el rock…zarzuela,
contra el deporte… pasteles, contra la
naturaleza… el salón y el sillón, contra eso…abstinencia, y contra lo efímero
del día a día…la firmeza de una roca.
A pesar de
ello, estuve durante rato pensando cómo era la vida diaria del emisor…,
colegio, juegos, deberes, familia, todo ello componía desde laudes, el
ejercicio completo semanal del susodicho, sí me pareció más difícil de alojar,
en qué momento habría descubierto, oído y/o aprendido tal afirmación, y tal
cual se desarrollaba todo, para mí
sería, por las circunstancias que yo estaba llevando a cabo, de lo más
difícil de aplicar. Eso si, jamás se me
pasó por la mente indagar en él, la mayoría de las veces el silencio es mejor
que decir algo inapropiado.
Primero
necesitaba una base constante, que durante el tiempo establecido consiguiera
perseverar, luego, la ejecución, ésta podría tener secuelas físicas, la
descarga de energía era fija. Por último, y esta era la recolección, corroborar
el hecho finalizado y disfrutar en
adelante, el resto de mi vida, sin lastre ni preocupación alguna.
Lo primero
era ya bastante lejano, aunque he visto
que ciertos monologuistas consiguen algún encadenado de prosa que estimula el
risorio, no era fácil, sobre todo sin conocer el carácter, ni la vida personal
del tribuno, con respecto a la parte central, imagino que sería como montar en
bici por primera vez, una vez conseguido el equilibrio y empujón inicial, ya va
todo sobre ruedas y siempre hacia adelante, la parte final no me preocupaba, seguro
que, en la tierra, estaría situada entre el Tigris y el Éufrates, ya que en
ésta última parte yo estaría ya gozando como si alguien me lanzara una escalera
desde el cielo.
Y todo,
todo esto, por juntar trece palabras, emitir con total normalidad una
frase que no dura más de 4 segundos,
cambiando seguidamente de tema... y que a mí me mantuvo durante toda la cena ocupado,
relegando el sushi e hilvanando
mentalmente el contenido de este, mi blog, y que en este momento escribo y
dedico al que se atrevió, seguro y con una mirada transparente, a revelarme lo que relato a continuación.. “
Tito, ¿ sabes ?... Si te ríes durante cinco
minutos seguidos se te acaban todos los problemas “.
A
mi sobrino Abel.
28
11 2012 – 1:35 h
Abrazo.
6 comentarios:
Entre el tito y el sobrino haceis buenas reflexiones
Entre el tito y el sobrino haceis buenas reflexiones. cvc
No te preguntes de donde vino sí no que pudo ver en ti para generarlo.El sobrino tiene a quien parecerse.Un abrazo niño.
DE ISUZU, guapo, maravilloso, escríbeme algo.
ERES UN CRACK MALDO... SIGUE ASÍ
Magnífico!!
Publicar un comentario